DIVID – Atención: Dividida

En este programa de entrenamiento, el cliente desempeña el papel de agente de seguridad en un aeropuerto. Además de tener que observar distintas escenas al mismo tiempo en varios monitores de control (las puertas corredizas de la entrada, los mostradores de emisión de pasajes, la cinta transportadora de equipajes), el cliente debe prestar atención a los anuncios de los altavoces. Los problemas que surgen deben corregirse pulsando la tecla de reacción. Si el cliente no reacciona a tiempo ante una situación crítica o un anuncio relevante, se congela la imagen en todos los canales y queda resaltado el canal donde se produjo el problema. Únicamente al pulsar la tecla de reacción vuelve a reanudarse la acción.

La capacidad de dividir la atención está determinada por los recursos de procesamiento y por la calidad de las tareas combinadas. Mientras más se asemejen las tareas, mayor es la interferencia que se genera entre estas (Wickens, 1984). En la vida cotidiana, la capacidad de dividir la atención es relevante para muchas actividades: por ejemplo, al conducir un vehículo, ya que se debe generalmente prestar atención al mismo tiempo a varios "flujos de información".

DIVID trabaja con 15 niveles de dificultad. Los niveles de dificultad se diferencian en el número de canales que el cliente debe vigilar, en la frecuencia con que ocurren los problemas, en la distancia mínima entre dos problemas y en el tiempo máximo disponible para reconocer un problema.